Lo que otro dijo...

http://www.wikio.es

'Prefiero que me odien por lo que soy a que me amen por lo que nunca seré' Kurt Cobain

martes, 25 de septiembre de 2012

Cuando correr no es de cobardes...




"Si llegas serás invencible; si no, habrás fracasado."

Madrid. San Agustín de Guadalix. 10 de la mañana del 23 de Septiembre de 2012.

El bullicio no deja lugar a la duda, estamos en el lugar adecuado. Hacemos la cola para recoger nuestra acreditación, los nervios empiezan a notarse en las piernas. No es un día cualquiera, nos enfrentamos a nuestros miedos; sólo hay un camino posible, el que nos hará invencibles.

Nuestra primera ETERNAL RUNNING, ¿una carrera?, ¿una fiesta?, ¿una guarrada? o... ¿todo al mismo tiempo?

Hay que vivirlo. Leer esto sólo podrá aproximar una ligera idea de lo que se siente cuando estás ahí. Desde que la marea de corredores comienza a correr cuando comienza la carrera, hasta que llegas a ese letrero maldito que tanto parecía esconderse durante más de hora y media de carrera.

Muchos preguntan eso de ¿qué tiempo has hecho?, ¿has ganado?, y te das cuenta de por qué ese lema qué reza en la camiseta conmemorativa de... "Humano, ¿sabías que soy invencible?". Humano es el que cree que correr es de cobardes. Hay que tener agallas para meterse a semejante barrizal. Humano es el que cree que las carreras sólo son correr más que el resto y llegar a un punto en esa posición. Humano es el que desconoce que llegando el último, puedes estar orgulloso. Humano es todo el que cree que si sufres, no merece la pena.

Sentir el reto dentro de ti; descubrir que, allá donde tus brazos no logren asirse, un brazo amigo te sujetará con fuerza; comprender que nunca podrás hundirte bajo las aguas, mientras a tus compañeros les quede una gota de aire en los pulmones. Esta carrera ha logrado que varios de nosotros descubran que su cuerpo y su mente pueden conseguir mucho más de lo que jamás han imaginado; se han dado cuenta de que, endureciendo el espíritu, las piernas se endurecen solas; la exigencia de la carrera tan sólo ha mostrado lo fuerte que es el vínculo que nos llega a unir. Si no llegamos todos, no llega ninguno.

No son los minutos los que me han hecho invencible. No es el sufrimiento el que me ha hecho invencible. Ha sido el sentirme parte de un todo, el ver vuestras caras de triunfo, el superar momentos desesperados y seguir adelante, el aprender de cada uno de vosotros... lo que me ha hecho inevitablemente INVENCIBLE.


Gracias a cada uno de mis buenos WEDAI's, por regalarme tamaña experiencia, sin pedir nada a cambio. Ya estoy buscando la siguiente ocasión para que todos volvamos a ser ¡¡¡INVENCIBLES!!!


-----
Los más curiosos podéis saber más sobre la carrera en http://www.fishermansfriendconeternalrunning.es
Fotos de la carrera de San Agustín: http://www.fishermansfriendconeternalrunning.es/fotos_guadalix.php


jueves, 16 de febrero de 2012

Definitivamente, somos tontos


Transporte público. Educación pública. Paraíso público. Parece que, con semejantes regalos, con semejantes oportunidades, la sociedad actual debería ser la más solidaria, la mejor preparada y la paz debería reinar en nuestras calles y parques. PUES NO.

No voy a entrar a la eterna discusión de que lo público no es GRATIS. Hoy voy más allá. Ya os he puesto en contexto teórico, en el paraíso de las oportunidades; el "sólo necesita adaptarse", ¡paguemos su adaptación! Ahora vayamos a su expresión práctica, básica, coloquial y, por desgracia, diaria.

Esta tarde, he terminado en un autobús a la hora a la que los jóvenes entran a sus colegios e institutos. No es de extrañar que utilicen un transporte público que, para ciertos sectores sociales, sí les sale gratis. Centrémonos en el grupo. Para salvarme de críticas progres sobre xenofobia, os anticipo que había de todo; hoy en día ya sean sudamericanos, marroquís o vitorianos de toda la vida, la chavalería tiene esa jodida costumbre de tomar como suyas costumbres muy americanas, de barrios bajos, para ser exactos. La ropa, los modos, incluso la música a todo trapo en sus móviles de 300 euros (aprovecho para recordar lo del transporte gratis). Lo que muchos de ellos no saben cuando adoptan esos signos que consideran "rebeldes", es que aquellos que los generaron han terminado, en su mayoría, o muertos o matando, o drogados o vendiendo droga. Y cada vez empiezan antes a volverse gilipollas.

Lo público. Macarras. Autobús. Creo que ya os tengo. Suben, con su música a todo trapo, el conductor les pide que se pongan cascos o la quiten, craso error. Se les dan muchas oportunidades, muchos caprichos, pero nadie se acuerda de ponerles límites. Cuando uno debe hacerlo, se encuentra con niños de 12 años que amenazan con romperle los dientes, como suena.

Si bien podrían haber centrado su "rebeldía" en el conductor, cosa que han hecho no quitando la música, insultándole y riéndose de él todo el viaje; han continuado faltando al respeto a una pobre señora a la que molestaban. Entre risotadas y desprecios, "vieja" le espetaban, alguien debería imponerse y decir a esa panda de impresentables que el transporte del que disfrutan lo ha pagado esa "vieja", que esa escuela que trata de enseñarles como sobrevivir y ellos desprecian también lo ha pagado esa "vieja". Y, no olvidemos, la falta de límites y respeto que les caracteriza también lo ha tenido que pagar la pobre "vieja".

Pensaréis que el problema es que esos chicos son malos, que hay que encerrarlos; nada más lejos. El problema es que somos TONTOS. Nos hemos dejado embelesar por esa ideología de dar todo lo que tenemos y no pedir ninguna responsabilidad porque somos TONTOS. Mientras sigamos pensando que poner límites y ser estrictos es cosa de retrógrados fascistas, seguiremos siendo TONTOS.

Desde pequeñito me han enseñado que, cuando recibes algo preciado, tu obligación es cuidarlo y aprender a dar tú a los demás algo preciado. Hasta el día en el que los ciudadanos no empecemos a ser responsables de lo que hacemos y lo que decimos, seguiremos pagando el pato por los que tienen más jeta que nosotros. Ah, y seremos más TONTOS aún.

Hoy he sentido vergüenza. No porque haya niñatos maleducados. No porque el conductor y la pobre señora hayan pasado un mal rato. He sentido vergüenza porque esa gente que se ha pasado de la raya, se va a seguir yendo de rositas. Y si no queremos que se conviertan en personas MALAS que piensen que hacer el mal no tiene consecuencias, por favor, dejemos de ser TONTOS.

Sigamos regalando todo, hasta que hagan con lo que nosotros lo que les de la gana, hasta que alguien se levante de su asiento, y les cruce la cara. Luego sólo hay que decir que esa persona es violenta y vive en el pasado; pues yo diré que es una persona HARTA de ser un TONTO más.